3.3.12

La Bandera de Mochila

La bandera de mochila es un antiguo elemento exclusivo del ejército español. Actualmente se intenta recuperar por parte de la asociación Ares de reservistas españoles, enviándola a sus socios.

Esta bandera de reducidas dimensiones (60x80 cm o 75x90 cm) se empezó a dar al soldado alrededor del año 1860, instaurándola los regimientos de infantería del siglo XIX. Fue dotación para el ejército expedicionario de África. Años después, la Real Orden del 12 de diciembre de 1904, declara reglamentario para todos los Cuerpos del Ejército, el pañuelo cubrepercha, denominado de bandera española.

La bandera de mochila fue creada para que el soldado pudiera cubrir y proteger del polvo (no había taquillas) sus pertenencias en la percha o repisa de su dormitorio, sobre todo si estaba en un campamento. Por esta utilidad, la bandera tiene sus colores y escudo en sentido vertical. El escudo, ribeteado en negro o rojo, solía ser el del regimiento con una leyenda, el mote o sobrenombre de la unidad. En el Museo del Ejército se conserva la del General Primo de Rivera.

En campaña se llevaba en la mochila, de ahí su otro nombre más corriente, y servía para, atada por fuera, señalar en avanzadilla a los que venían más a retaguardia, que eran destacados para señalizar su posición. También se empleaba como mortaja, si se producía baja en acción, se arropaba el cadáver y se cubría su rostro antes de rellenar con tierra la tumba. El soldado bien sabía que no había una bandera de España para cada cadáver, que a veces eran muchos y por ello se utilizaba su bandera de mochila.

Por su propia condición y uso la bandera era sencilla, barata, de escasa calidad textil, carecía de vaina y llevaba unos cordoncillos en los cuatro extremos para ser atada. Roja al principio, el color militar español, luego se generalizó con los colores nacionales. Carecía de flecos, sólo estaba coloreada por una cara, traspasando a la otra la impresión.

Cuando era licenciado, el soldado conservaba la bandera de mochila como testigo de su deber cumplido y como recuerdo de su vida militar. Nunca como entonces hubo tantos hogares españoles con los colores nacionales para mostrar a los hijos el amor a España, ese amor que hay que enseñar y acrecentar desde el vientre de la madre.

La bandera de mochila, de percha o cubre-percha , se dejó de usar por nuestro Ejército hacia el año 1927. La campaña de África dio a esta prenda un toque de romanticismo que recoge el cancionero militar.

Nuestra prenda de mochila lleva el escudo cuartelado de los reservistas voluntarios españoles en negro con el lema en la parte inferior: Siempre dispuestos. El cuartelado es un campo ajedrezado con sendas espadas, a la misma altura, una de ellas orientada hacia abajo y otra hacia lo alto. Sobre ambos cuarteles y en lugar de preeminencia heráldica se sitúan las tres franjas de la bandera de España.

“El día que yo me muera

si estoy lejos de mi Patria

sólo quiero que me cubran

con la Bandera de España“